No tenía pensado hablar hoy de Death Cab for Cutie, una de las bandas de indie rock más genuinas de los últimos veinte años en Estados Unidos.
Con nueve álbumes de estudio y un reciente "The Georgia EP" editado hace unos meses, los de Ben Gibbard tienen una carrera sólida como pocas.
Pero hoy he vuelto a escuchar por casualidad una obra maestra que se llama "Codes & Keys", y de repente me di cuenta de que habían pasado nada menos que diez años. Este single que dá título al disco homónimo de 2011 es un tema redondo y brillante como pocos. Sin duda alguna una de las mejores canciones de ese año.
Creo que nadie se debería perder temas así, si no la conocéis os invito a que lo hagáis porque merece mucho la pena.
Recordar canciones es recordar sensaciones. Son trocitos de tu vida que pasan volando entre los ojos y te dejan esa impronta de un olor.
Pues eso. A disfrutar.
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